El Consejo de Gobierno ha aprobado al Decreto por el que se establecen las bases reguladoras para el régimen de concesión de subvenciones para actuaciones en energías renovables en Extremadura y se aprueba la primera convocatoria, dotada con 2,2 millones de euros.

Estas ayudas se ponen en marcha por primera vez en la región y están incluidas en el Plan de la Bioenergía de Extremadura 2015-2020, el objetivo es promocionar el uso de energías limpias a favor de un modelo de desarrollo sostenible con un mejor uso de la energía y de promoción de las renovables.

Para el Gobierno de Extremadura, el cambio modal en los patrones de consumo energético en todos los sectores es un objetivo estratégico en el desarrollo de la política regional, impulsado por el impacto que supone el ahorro en los costes energéticos tanto para las familias como para las empresas, reforzando la competitividad y seguridad energética, así como por la creación de empleo.

El abanico de posibles beneficiarios es muy amplio, desde particulares a empresas, comunidades de vecinos, corporaciones locales, etc. Las ayudas irán destinadas a calderas de biomasa térmica (para calefacción y procesos productivos industriales), y a las instalaciones de energías renovables para usos térmicos, ya sea energía solar térmica de baja temperatura como instalaciones de geotermia, aerotermia e hidrotermia.

Desde el ejecutivo regional, se ha subrayado que es una concesión directa mediante convocatoria abierta. La subvención consistirá en una ayuda a fondo perdido y para cada tipo de instalación se establece un coste máximo de referencia por unidad de potencia instalada, así como unos porcentajes de ayuda en función de sus características (entre un 30 y un 45 por ciento), con un límite máximo de subvención a obtener por cada actuación.

El plazo de presentación de solicitudes está abierto hasta el 1 de noviembre de 2015.